Por ello el equipo de endocrinología de la Fundación NISA junto con Aramark, han realizado la "Guía Alimentaria para Personas Mayores".
Desde un estudio previo detectaron que la información recibida por familiares y cuidadores era deficiente y tenía lagunas. Por lo que el obejtivo se centró en dar información sobre carencias nutricionales, para facilitar una alimentación adecuada y una vida saludable.
La guía por tanto se convierte en una herramienta de ayuda para familiares e instituciones especializadas en el cuidado diario que realizan de los mayores de 65 años, guiándoles para evitar la desnutrición.
En estos casos es imprescindible realizar un estudio por menorizado del paciente y de su alimentación, teniendo en cuenta su situación personal. No necesita los mismos alimentos una persona con movilidad reducida o dependiente, que otra que se vale por sí misma. Debemos valorar las necesidades de cada individuo y no generalizar.
Para estar bien nutridos los expertos recomiendan que la base de la dieta sean los cereales y tubérculos (unas 6 veces al día) y se consuman verduras y hortalizas (mínimo 2 veces al día), fruta (3 raciones), frutos secos, lácteos, carnes (2 o 3 a la semana), pescado (4 o 5 a la semana), huevos (3 a la semana), legumbres (2 o 3 a la semana), agua (8 vasos al día). En la Guía, se establecen 10 consejos saludables para mantener una dieta óptima y estar bien alimentados: evitar el consumo de alcohol, eliminar el tabaco, controlar la ingesta de líquidos, moderar el consumo de alimentos salados, cuidar el aporte de calcio, mantener la musculatura, cuidar la dentadura, mantener una vida activa y evitar la soledad, realizar una dieta variada y cuidar el peso.
Se puede medir el estado nutricional mediante el apetito y la ingesta, la pérdida de peso, el índice IMC (Índice de Masa Corporal), la medición de los pliegues de la piel y de la circunferencia media del brazo y las analíticas. A la hora de planificar una dieta también hay que tener en cuenta aspectos nutricionales, sensoriales y sociales. Se deben escoger cuidadosamente los alimentos dando preferencia a los que contengan alta densidad en nutrientes para mantener el peso estable. Las necesidades energéticas son diferentes para cada persona, por este motivo es importante considerar las cantidades correctas de proteínas, hidratos de carbono, grasas, vitaminas, minerales y agua de manera personalizada.
Fuente: Aramark